Los errores se asumen, las experiencias se viven, las críticas se ignoran, las mentiras se descubren y la vida se disfruta.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

una persona débil jugando a ser fuerte.

siguió riendo, continúo con esa sonrisa de oreja a oreja sin importarle en absoluto que él ya no estuviera cerca de ella, en verdad, nosotros nos llegamos a creer incluso que ya no quedaba nada, que para ella solo era un simple recuerdo al que ya no le daba importancia. Nos hizo creer incluso que había empezado otra nueva etapa de su vida, que había conocido a otros tipos y que se encontraba bien. No contaba que al caer la noche se acordaba de el día en que la miró y le dijo que la quería, ni tampoco mencionó que había colgado su fotografía en un marco, ni que recordaba todos esos días en la playa, o incluso las veces en que él la tenía entre sus brazos y entonces ella se sentía la persona mas afortunada que había sobre la tierra. Nunca contó que al verle pasar le seguían temblando las rodillas y cada vez que recordaba su voz no podía evitar sentir un nudo en la garganta, el mismo nudo que sintió tiempo atrás con su primer beso solo que esta vez ese nudo era amargo. Nunca contó que se quebró la voz pensando en él, ni que odiaba tenerle al lado y no poderle decir que seguía siendo lo mas importante en su vida y que a pesar de todo, le quería. Tampoco nos contó el dolor que sentía cuando le veía y él le hablaba de otras o se hacia notar o incluso cuando los demás iban y le decían que él estaba celoso cuando ella sabía que dentro de él ya no quedaba nada. Nunca le gustó contar sus sentimientos, ni tan siquiera mostrar a los demás que en verdad, detrás de esa faceta de una joven fuerte se escondía una persona débil. Pero cuando me abrazó y rompió a llorar, entonces pude ver todos y cada uno de sus sentimientos, y entendí que como ella nadie le querrá jamás.

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